Los comerciales que venden a las zanahorias bebé como comida chatarra

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En un intento por cambiar la percepción que tienen los jovenes y adultos en relación a las zanahorias, más de cincuenta productores de este vegetal en los Estados Unidos apostaron a la iniciativa de Crispin Porter+Bogusky que consiste en hacer que las zanahorias bebés se conviertan en chucherías en una campaña que apunta a declarar a estos vegetales oficialmente como comida chatarra.

Una genialidad que esperemos tenga resultados, en especial viniendo de una agencia que ha dominado el arte de hacer campañas para comida chatarra.

Imagínense a las zanahorias empaquetadas en bolsas similares a las de Doritos, vendidas en máquinas de chucherías en los colegios, promocionadas en vallas con slogas como «Los verdaderos deditos anaranjados», con productos tácticos para Halloween como los  «Scarrots», y comerciales donde se muestran las zanahorias de una manera divertida, sexy, atractiva para un producto naranja y crujiente que también te deja los dedos de color naranja, pero no tan rápido como lo harían los cheetos.

La campaña va con todo y cuenta con un presupuesto de 25 millones de dólares, que es una migaja en comparación a lo que quieren quitarle al mercado de los snacks y chucherías con una campaña integrada que apenas comienza y ya está siendo aplaudida hasta por sus competidores en FritoLay.

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Los comerciales de BabyCarrots.com.